Protección Civil lleva a cabo una campaña de recogida de juguetes en el concejo de Piloña
«Ver la sonrisa de los niños al recibir los regalos compensa todos los esfuerzos realizados». Así describe el coordinador de Protección Civil de Piloña, Francisco Rodríguez, el motivo que lleva a la agrupación de voluntarios a llevar a cabo desde hace doce años una campaña solidaria de recogida de juguetes que tiene como único fin colaborar con los Reyes Magos para que ningún niño piloñés se quede sin regalo el próximo 6 de enero.
Un año más vuelven a pedir la colaboración de todo el mundo, tanto de Piloña como del resto de la región, para que aporten sus juguetes, nuevos o en buen estado, que luego serán repartidos por los voluntarios de Protección Civil, en colaboración con el departamento de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Piloña, entre los niños más necesitados del concejo.
El propio Francisco Rodríguez recuerda cómo surgió esta campaña, que, con el paso de los años, se ha convertido en un referente de solidaridad en la comarca. «Tras realizar una campaña de recogida de ropa y medicinas para Kosovo, fallida por problemas fronterizos, decidimos hacer algo solidario más cercano y con garantías de éxito», explica Rodríguez.
De este modo, más de cuarenta niños, algunos de la misma familia, reciben cada año un lote compuesto por juguetes, libros y caramelos donados por más de un centenar de personas que suelen pasar por la oficina desde mediados de diciembre para interesarse por la causa. De igual manera, Rodríguez asegura que en caso de haber regalos importantes como, por ejemplo, una bicicleta, serán sorteados entre los potenciales destinatarios, como ya se hizo en otras ediciones.
Este volumen de participación exige un gran trabajo por parte de los voluntarios, y por ello desde la agrupación demandan la máxima colaboración posible. «Pedimos que, por favor, no nos envíen juguetes rotos ni sucios, porque nos generan un trabajo innecesario y nos quitan tiempo para publicitar la campaña», señala, aunque, por otro lado, señala que «a pesar del trabajo que conlleva, estamos convencidos de que merece la pena».