La integración y la lucha contra todo tipo de barreras sociales es el objetivo que mueve a este tipo de agrupaciones a trabajar con empeño. El Colegio Don Orione de Posada y la asociación Emburria, de Cangas de Onís, cuentan con una amplia trayectoria en el cuidado y apoyo de personas con algún tipo de discapacidad física o intelectual. Actualmente ambas entidades se encuentran inmersas en sendos proyectos que buscan facilitar e impulsar el desarrollo físico y profesional de este sector de la sociedad que, aunque hay quien aún pueda pensar lo contrario, tiene muchas posibilidades tanto sociales como laborales.

La agrupación canguesa, Emburria, que promueve la integración mediante las actividades culturales y el tiempo de ocio, tiene previsto estrenar un nuevo proyecto que pretende adaptar en cierto modo la oferta laboral a las personas discapacitadas. El nuevo servicio de información y orientación para el empleo trabajará tanto con los discapacitados, ofreciéndoles todo tipo de formación y asesoramiento en el campo, como con empresas de la zona que es probable que desconozcan todas las ventajas que supone contratar a estas personas. Esta innovadora actuación comenzará durante los próximos meses como un proyecto piloto para comprobar su funcionamiento y acogida en la comarca. La propia asociación da ejemplo de integración laboral y cuenta con dos trabajadores en plantilla con algún tipo de discapacidad. «Lo que buscamos es que, gracias al asesoramiento mutuo, tanto las empresas como los trabajadores puedan aprovecharse de una situación que ya es suficientemente complicada», explica una de las trabajadoras.

Este servicio formará a los discapacitados mediante cursos, charlas o talleres en los que se intentará potenciar en ellos habilidades sociales, así como prepararlos para superar satisfactoriamente las posibles entrevistas de trabajo que pudieran surgir, además de trabajar para ampliar la oferta de empleo de la zona, concienciando tanto a entidades públicas como privadas. «Hay una ley que obliga a las empresas a contar con un cupo de un 5% de personas con algún tipo de discapacidad contratadas», recuerda la asociación.