Llanes, María TORAÑO

Fani, Juan, Eva y Teo sufren diferentes tipos de discapacidad: auditiva, visual, física e intelectual, respectivamente. Pero tras estos cuatro nombres no hay personas reales, sino que se esconden los protagonistas del juego didáctico «Me muevo», que ayer estrenaron los alumnos del colegio Peña Tú de Llanes, con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, y del que en los próximos meses de distribuirán 3.000 unidades por toda Asturias.

«Con el juego pretendemos que se conozcan los diversos tipos de discapacidades y que se tenga en cuenta que las barreras no sólo son arquitectónicas sino también sociales, que son las que más estigmatizan», aseguró Jessica García Brión, representante de la Confederación Coordinadora Estatal de Minusválidos Físicos de España (COCEMFE), que desarrolló el juego en colaboración con Cajastur.

En un tablero inspirado en el del tradicional juego de la oca se van sucediendo las casillas en las que los protagonistas deberán enfrentarse a diferentes problemas, como obras que dificultan el tránsito, escaleras de acceso a edificios sin rampas o semáforos sin alertas auditivas, entre otros. Además, los jugadores podrán descubrir entre tirada y tirada los lugares emblemáticos de Asturias que aparecen en algunas de las casillas: la basílica de Covadonga, la catedral de Oviedo, Santa María del Naranco, el Ayuntamiento de Avilés, el «Elogio del Horizonte» de Gijón o el Archivo de Indianos de Colombres.

«La falta de adecuación del entorno es lo que discapacita a las personas», agregó García Brión, para quien es muy importante que con el juego se transmitan valores de «accesibilidad universal» y se amplíe el conocimiento sobre las discapacidades, ya que «son muchas diferentes y cada persona las sufre de una manera», agregó.

Por su parte, la directora del centro educativo, Nieves Cantero, mostró su entusiasmo por el éxito de las actividades desarrolladas esta semana sobre discapacidad. «Tanto el comentario de los alumnos como de los profesores está siendo una maravilla. El martes vinieron representantes de la asociación de sordos del Principado, trabajaron en talleres adaptados según las edades de los niños y salieron todos encantados», comentó.

También han pasado esta semana por el colegio un equipo de atención a la discapacidad visual de la ONCE y la Asociación Asturiana de Retinosis Pigmentaria. Hoy concluyen las actividades con la visita a Llanes de un grupo de alumnos del colegio Don Orione de Posada.